Escribirte, escribirte, dibujarte. Llenarte el pelo de todas las palabras detenidas, colgadas en el aire, en el tiempo, en aquella rama llena de flores amarillas de cortes cuya belleza me pone los pelos de punta cuando vengo bajando sola, por la carretera, pensando. Definir el misterio, el momento preciso del descubrimiento, el amor, esta sensación de aire comprimido dentro del cuerpo curvo, la explosiva felicidad que me saca las lágrimas y me colorea los ojos, la piel, los dientes, mientras voy volviéndome flor, enredadera, castillo, poema, entre tus manos que me acarician y me van deshojando, sacándome las palabras, volteándome de adentro para afuera, chorreando mi pasado, mi infancia de recuerdos felices, de sueños...
¿Cuantas veces las palabras son fieles amigas que se quedan cortas a la hora del festejo? ¿cuantas veces son perfectos disfraces?
Comentarios
siempre se quedan cortas..
si hablasemos menos...y dejasemos que los ojos dijeran las cosas.....todo seria mas completo....
precioso fragmennto...
un besazo...
encantada de visitar tu espacio....
.. besitos Alejandra..
Saludotes!!!
Besos.