Llevaba algo de prisa, buscando lo que siempre se busca, algo asi como la felicidad.
Algo diferente llamo mi atención, sería el colorido de las flores, lo bonito del jardin, pero se veia especialmente hermoso el parquesito de siempre. Recorde de pronto cuando en mi infancia, ese jardin era de mis lugares preferidos de juegos. Lo curioso de las bancas siempre llamaron mi atención, la forma, los colores no eran como en los demás parques.
Un hombre pequeño me sonrio y se acerco a mi preguntandome: ¿Haz visto la luna? Mi contestación fue de incredulidad pura "señor no se da cuenta que es de día." Pero el insistia, ahora señalandome a la fuente: ¿ya viste la luna? No entendia que llevaba prisa y no tenia tiempo para boberias. Sin mas palabras me aleje de él y continue mi camino.
Pase un par de calles y de nuevo el mismo jardin, con las flores vistosas, con la alegria que dan los jardines bien cuidados. La única diferencia era la pequeña de ojos grandes y expresivos que se encontraba ahora en el lugar en el que antes estaba el hombre pequeño. Su piel era muy blanca y su vestido muy rosa. Yo aún contrariada por pasar de nuevo
por el mismo lugar me acerque, con su voz infatil me dice : ¿Haz visto la luna? Un brote de enojo e impaciencia se apodero de mi. Mi contestación fue seca "No y llevo prisa". En sus ojos podia ver la tristeza por mi negativa pero a la vez la esperanza de que ya volveria. Camine aún con mas velocidad, necesitaba llegar, mi felicidad dependia de ello. Camine y camine.
El jardin aparecio ante mi nuevamente, no podia creerlo otra vez estaba ahí. Por más que quisiera seguir, volvia al mismo punto. Pense, ahora quien aparecerá. Mi sorpresa fue enorme, al divisar una silueta. Olvide el jardin, la prisa, el enojo. Era mi querido abuelo. Ese que me dejo muchas sonrisas e historias inolvidables como recuerdos. Ese que me dejo a los 9 años para irse a un
camino mas extenso. Su abrazo fue reconfortante, hacia tanto tiempo que no lo abrazaba. Hizo que me despegará un poco, no queria que se acabará ese momento. Y me pregunta: ¿Ya viste la luna? Conteste, Abuelo tu tambien, es de día, la luna no se ve de dia y mucho menos en el fondo de una fuente. Su respuesta fue directa: ¿por qué no crees? Si mi abuelo decia que estaba la Luna, tendría que verla.
El nunca mentia. Me aproxime a la fuente, mire en el fondo. Estaba llena de agua clara y cristalina. Y ahí justo ahí se reflejaba una luna llena enorme de color como morado.
Algo diferente llamo mi atención, sería el colorido de las flores, lo bonito del jardin, pero se veia especialmente hermoso el parquesito de siempre. Recorde de pronto cuando en mi infancia, ese jardin era de mis lugares preferidos de juegos. Lo curioso de las bancas siempre llamaron mi atención, la forma, los colores no eran como en los demás parques.
Un hombre pequeño me sonrio y se acerco a mi preguntandome: ¿Haz visto la luna? Mi contestación fue de incredulidad pura "señor no se da cuenta que es de día." Pero el insistia, ahora señalandome a la fuente: ¿ya viste la luna? No entendia que llevaba prisa y no tenia tiempo para boberias. Sin mas palabras me aleje de él y continue mi camino.
Pase un par de calles y de nuevo el mismo jardin, con las flores vistosas, con la alegria que dan los jardines bien cuidados. La única diferencia era la pequeña de ojos grandes y expresivos que se encontraba ahora en el lugar en el que antes estaba el hombre pequeño. Su piel era muy blanca y su vestido muy rosa. Yo aún contrariada por pasar de nuevo
por el mismo lugar me acerque, con su voz infatil me dice : ¿Haz visto la luna? Un brote de enojo e impaciencia se apodero de mi. Mi contestación fue seca "No y llevo prisa". En sus ojos podia ver la tristeza por mi negativa pero a la vez la esperanza de que ya volveria. Camine aún con mas velocidad, necesitaba llegar, mi felicidad dependia de ello. Camine y camine.
El jardin aparecio ante mi nuevamente, no podia creerlo otra vez estaba ahí. Por más que quisiera seguir, volvia al mismo punto. Pense, ahora quien aparecerá. Mi sorpresa fue enorme, al divisar una silueta. Olvide el jardin, la prisa, el enojo. Era mi querido abuelo. Ese que me dejo muchas sonrisas e historias inolvidables como recuerdos. Ese que me dejo a los 9 años para irse a un
camino mas extenso. Su abrazo fue reconfortante, hacia tanto tiempo que no lo abrazaba. Hizo que me despegará un poco, no queria que se acabará ese momento. Y me pregunta: ¿Ya viste la luna? Conteste, Abuelo tu tambien, es de día, la luna no se ve de dia y mucho menos en el fondo de una fuente. Su respuesta fue directa: ¿por qué no crees? Si mi abuelo decia que estaba la Luna, tendría que verla.
El nunca mentia. Me aproxime a la fuente, mire en el fondo. Estaba llena de agua clara y cristalina. Y ahí justo ahí se reflejaba una luna llena enorme de color como morado.
Comentarios
BSS
A veces corremos por la vida y no contemplamos lo más bello de loo que nos rodea, ese es el mensaje de tu “sueño”.
Saludos y un abrazo
Besoss
Besos
La foto no es mia, la encontré buscando laberintos. Pero si transmite muchas cosas, curiosamente fue ideal para mi sueño. Gracias por tu visita.
Bohemia:
Abrazos de luna para ti tambien Bohe.
Sergio:
Sé que mi abuelito me cuida y me protege, tuvo que ser él quien me puso un estate quieto =)
Saluditos.
Maria:
Mira quien dice sobre las parabolas, para mi es un verdadero placer el leerte, transmites tanto.
Soy fan. Besito.
Justy:
Si creer y confiar por que tal vez no tengamos tantas oportunidades como paso en mi sueño.
Besito
Jorge:
De regreso estoy siguiendo la luna... Acompañame.
Beso
.. besos Alejandra..
Me gustó mucho el relato. Me gustó meter a tú abuelo, o al abuelo de quien sea, dentro de él.
Muy bueno.
Saludos