Tributo

Tenia tiempo con la idea de hacer este post pero no hallaba la manera de empezar, por fin esta mañana me encontré con un mensaje que me hizo animarme y tratar de intentar transmitir esta idea.
La cosa es ¿cuantos rostros han pasado ante tus ojos de manera diaria a lo largo de tu larga o corta vida ? ¿Y cuántos permanecen en tu corazón por siempre? He tratado de hacer un pequeño recuento de cuantas y cuales personas me han definido como la persona que soy en este momento y la verdad aún no he terminado de hacerlo, aunque tengo mis serias dudas que llegaré a hacerlo algún día.
Es increíble pensar que existen personas que han coincidido con tu existencia por un par de horas y que te han dejado tanto para siempre. No dejo de maravillarme al jugar con las probabilidades para que exactamente a mi me haya llegado ese mensaje por parte de justamente alguna persona en algún momento preciso de mi vida. Es cuando confirmas nuevamente que existe una fuerza mucho mayor a ti, capaz de mover delicadamente el mundo para que tu pequeña existencia pueda tocar a otra existencia similar a la tuya en un tiempo determinado.
En mi vida han habido personas demasiado especiales y demasiado queridas, de edad física pequeñita que con su fragilidad aparente te hacen vibrar por la perfección de su ser y no olvidar a las llenas de experiencia que siempre tienen el consejo oportuno y miles de historias que contarte.
Vienen a mi mente una diversidad de personajes que se han cruzado en mi camino, como olvidar a la dulzura dormida en el recuerdo que me hizo vibrar por ser mi primer amor; al niño que corría todos los días para darme el beso de buenas tardes durante mas de un año; al profesor recio y tierno que con paciencia y dedicación me hizo amar el deporte; a la magia que vivía cada vez que se ganaba un partido comandado por el increíble Jordan; a la voz de crucigrama que con sus interminables peleas me hizo retar a la vida mas de una vez; a la morena que ha compartido su amistad y que con su inquietud incansable me ha hecho descubrir mares de cosas; a la activa rizitos que con sus miles de actividades siempre me recuerda que siempre debe de haber tiempo para todo; a la princesa enamorada del amor, que siempre me hace pensar que siempre se puede dar mas y que las locuras son una buena forma para vivir intensamente, al niño “abelardo” que me un día me tomo de las manos y me dijo que llorar nunca ha sido malo; al niño tierno que se entrega completito a las cosas que hace y con el que he compartido épocas de crisis mutuas; a mi par de hermanas que han crecido junto a mi y que me han enseñado que una sonrisa y un paso de baile nunca esta de más para esta vida; al niño que un día se me presento en mis sueños y luego en mi vida, que me hizo reinventar el sentido de confianza instantánea; a la voz de Alejandrinito que me hizo soñar varias noches con sus letras; a los ojos negros que me hicieron estremecer mas de una vez con su mirada altanera; al niño que me hablaba, peleaba y luego colgaba que con su singular manera de ver el mundo me hace reconsiderar varias ideas; al príncipe zetas que me ha hecho descubrir todo un nuevo mundo de fe y sueños; a la pequeña niña que aparecio en mi vida muleteada y que siempre ha estado alli y espero que asi siga; a mi hermanito que me enseño que la responsabilidad no necesariamente esta acompañada de seriedad y sí con mordidas; al Jlu que me hizo rescribir mis limites de paciencia; al ptkas que me a hecho pensar que la ternura muchas veces se nos presenta con una armadura de indiferencia; al chiquitito al otro lado del charco que me hace pensar en maneras en como puedo convencerlo de que el amor si existe; al niño viejo que un día me hizo una de las preguntas mas difíciles con las que me enfrentado y que con el que he compartido platicas bastantes singulares; a la amiga que con sus aventuras me hizo ver que el mundo es chiquito y que si hay posibilidades de conocerlo; al árbol que indirectamente fue un impulso para lo que según esto escribo hay que darlo a conocer; a mi familia que son los que mas han contribuido a que yo sea un ser humano feliz y responsable con sus acciones.