Joshua van Pandira

Noche, luna llena reflejo de un mar de estrellas, algunas manos unidas pidiendo misericordia, piedad y amor, a un tal Joshua van Pandira, señor de señores, amor de amores, recuerdo de un profundo sufrimiento y un amor eterno. El fuego reflejaba las esperanzas de unos cuantos corazones que unidos proclamaban paz, armonia y amor.
¿Que hermoso es tener las manos unidas ? Compartiendo el pan, los frutos y un tantito de fanta sabor fresa.
La luna, las estrellas y un par de coyotes que con su canto formaban el marco perfecto para sellar el circulo de luz que se desplegaba.
Gracias señor, Joshua van Pandira por ser grande y bondadoso confiandonos sutilmente una noche hermosa, de danza, de suplicas y de fuego...

Comentarios

Principe Maktub dijo…
Joshua:

El mejor amigo que he conocido!